Alberto C. Vollmer: “Sin obstáculos no hay glorias”

Convencido de que si no se trabaja en equipo, es imposible obtener el éxito, el Presidente Ejecutivo de Ron Santa Teresa siente que su mayor lujo es poder tener contacto muy cercano y de mucha confianza con todos los niveles de la sociedad. Frente a las exigencias de Venezuela, considera que el sector empresarial debe estar comprometido y ser parte de la solución

 Por Gloria Calderón

La mañana del 2 de septiembre de este año, al conceder esta entrevista, el hombre de negocios se dio cuenta, de repente, de que ese día estaba celebrando su aniversario número 19 en Ron Santa Teresa. La satisfacción iluminó sus ojos, por primera vez en la conversación, y luego reapareció al contar una anécdota donde su pequeña hija fue parte activa. Así dejó brotar la afabilidad y cercanía con las que suele relacionarse en distintos ámbitos.

Alberto C. Vollmer, ingeniero civil venezolano, perteneciente a una distinguida familia de empresarios, sabe moverse a sus anchas. Lo hace, por ejemplo, en el Foro Económico Mundial de Suiza, donde fue reconocido por su liderazgo en 2007. También es habitual verlo comprometido con sectores populares. En Carapita, Caracas, trabajó en un proyecto de viviendas en los años 90. Y desde 2003, mediante Proyecto Alcatraz, se ha subido las mangas en comunidades de escasos recursos cercanas a la Hacienda Santa Teresa -establecida en 1796, en los Valles de Aragua- o, de manera reciente, en centros penitenciarios en distintos puntos del país.

El Presidente Ejecutivo de Ron Santa Teresa habla en plural. El “nosotros” suele sustituir al “yo” para narrar su visión y, sobre todo, sus acciones. Además, se afana para dar detalles, con sencillez, y llegar a sus interlocutores. Quizás es por eso que, amparado en sus principios, ha logrado dialogar con personas de mundos disímiles, desde un Jefe de Estado hasta un presidiario.

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